44. LORENA LOPEZ. Comadronas en el área rural de Guatemala.
febrero 28, 2023
Gracias a todas nuestras radioescuchas por sintonizar nuestro proyecto feminista CLAUDINE EN BILBAO alrededor del mundo, en esta oportunidad compartimos con todas ustedes una entrevista con Lorena López, quien visibilizará información importante respecto a la labor de LAS COMADRONAS EN EL AREA RURAL DE GUATEMALA.
Las comadronas o parteras tradicionales son esenciales en la vida guatemalteca y están en la primera línea de salud para miles de mujeres y familias en zonas urbanas y rurales de Guatemala. Acompañan a las madres desde los primeros meses de embarazo, orientan las prácticas de salud de mujeres y sus familias, comparten sus conocimientos de medicina tradicional y proveen atención y cuidado en el parto, recibiendo así vida nueva en sus manos. Ellas acompañan también el proceso posterior al parto.
Las comadronas además son promotoras de la lactancia materna, una práctica fundamental para la salud y nutrición en las primeras etapas de los bebés. En Guatemala el respeto a las comadronas en distintos lugares es de veneración al ser guardianas de conocimientos médicos ancestrales, sin embargo, por parte del ministerio de salud del paìs este reconocimiento es casi nulo ejerciendo sobre ellas distintas acciones de discriminación, racismo y exclusión para demeritar la valiosa labor que realizan.
LOUIS BOURGEOIS
La práctica de la medicina ha estado históricamente reservada a los hombres. Solamente algunos ámbitos concretos estaban permitidos a las mujeres. Uno de ellos era el de las parturientas. Durante siglos, la amplia experiencia de estas mujeres fue respetada por los hombres. Algunas de ellas incluso pasaron a la historia con nombre propio. Ese fue el caso de Louise Bourgeois, quien no sólo ejerció como comadrona, sino que plasmó en un libro toda su experiencia.
Louise Bourgeois nació en 1563 en una zona rural a las afueras de Paris, en el conocido barrio de Faubourg Saint-Germain, donde su padre poseía importantes propiedades. Louise pertenecía a la burguesía francesa por lo que tuvo la suerte de recibir una muy buena educación. En 1584 se casó con el cirujano Martín Boursier. Martín era ayudante de Ambroise Paré, entonces jefe de cirugía del hospital para pobres de París, Hôtel Dieu. Es más que probable que Louise aprendiera los primeros conocimientos de medicina y cirugía de la mano de su marido. Con 24 años, Louise ya había tenido tres hijos. Al poco tiempo, en 1593 ya estaba ejerciendo como partera en París y su fama se empezó a extender.
En 1601, la profesionalidad de Louise llegó a oídos de la reina de Francia María de Médicis. Un año antes se había casado con Enrique IV y ya estaban esperando su primer hijo. María impuso la elección de partera a su marido, quien había elegido a Madame Dupuis como partera real. La reina había oído las experiencias de las damas de la corte con Louise y su excelente reputación fue la razón de ser llamada a palacio. Durante nueve años, Louise trajo al mundo a los seis hijos de la reina, entre ellos el futuro Luis XIII. Fue galardonada en 1608 por sus servicios como comadrona a la corona real.
Pero ocurrió algo inesperado que cambiaría el rumbo de la historia de Louise Bourgeois. En 1627 la princesa María de Borbón-Montpensier moría después del parto y Bourgeois fue responsabilizada de su muerte. La princesa murió por fiebre después del alumbramiento y fueron los hombres físicos de oficio, muchos enemistados con Bourgeois, los que escribieron el informe de la autopsia. En él descubrieron restos de placenta en la matriz de la princesa, culpando a la famosa partera de su muerte por ser la responsable de dejar allí aquellos restos.
Este fatal suceso llevó a la famosa partera al ostracismo profesional, a la exclusión del ejercicio de matronería, no sin antes pasar por un duro juicio durante el que no dudó en defender su impecable trayectoria. Se enfrentó a médicos que no dudaron en destruir su reputación como partera. Pero Bourgeois no titubeó a la hora de dar respuesta a semejantes acusaciones. Se atrevió a cuestionar la validez de las opiniones anteriores. Consideraba que dicho informe era una prueba más de la falta de conocimiento de sus verdugos en lo que se refiere al útero y lo que constituye para la mujer.
Pero Louise Bourgeois no pasó a la historia solamente por ser una partera real. En 1609 decidió poner sus conocimientos por escrito y publicó su obra OBSERVACIONES DIVERSAS SOBRE LA ESTERILIDAD, EL ABORTO, LA FERTILIDAD, EL PARTO Y ENFERMEDADES DE LA MUJER Y LOS RECIÉN NACIDOS. El libro de Louise se convirtió en un auténtico tratado de obstetricia en el que plasmó su experiencia, casi 2000 partos, en 50 capítulos con explicaciones que actualmente siguen estando vigentes.